La Fiscalía procesa a Cristhian Diego N. G., de 31 años, como el presunto autor intelectual del femicidio de su esposa Paola Ortega, registrada el pasado 2 de enero en Sangolquí.
Cristhian Diego N. G. fue privado de su libertad, luego de que la fiscal Marlyn Calderón le formuló cargos ya que todo apuntaría que participó en la muerte violenta de su esposa. Hecho que de manera preliminar fue difundido como un robo.
El 2 de enero, la víctima fue atacada por dos hombres, cuando se encontraba en el interior de su vehículo, mientras esperaba que su esposo regrese de un local de hamburguesas. Uno de los hombres la apuñaló 11 veces en el cuello. Sin embargo, el esposo dio otra versión en la Fiscalía.
Cristian Diego N. G. dijo que apuñalaron a su esposa por robarle USD 600 y una cadena de oro, cuando él compraba comida rápida.
Al regresar al auto y verla ensangrentada, trató de comunicarse al ECU 9-1-1, pero no había podido explicarles su ubicación exacta.
Entonces habría llamado a sus familiares, quienes llegaron en ocho minutos al lugar y, al ver la escena, la llevaron al hospital ubicado a dos cuadras del lugar de los hechos.
Pero antes que llegue la familia -afirmó el sospechoso- le dijo a su esposa: “cállate, no digas nada, ya te vamos a llevar al médico”.
Como parte de las investigaciones se revisaron los videos de las cámaras de seguridad del sector y producto de las pericias se determinó que lo expuesto por el ahora procesado era completamente diferente.
En las imágenes se observa que Cristhian Diego N. G. desbloquea el seguro de la puerta del auto con el control remoto a media cuadra de su vehículo y, acto seguido, entran los dos autores materiales para apuñalar a Paola.
Una vez cometido el crimen, Cristhian Diego N. G. se dio varias vueltas y hasta conversó por el teléfono. Al encontrar a su esposa herida, no la trasladó hasta la casa de salud ubicada a dos cuadras, por lo que en la etapa de instrucción fiscal -que durará 90 días-, se determinará si Paola llegó o no con vida hasta el hospital.
La Fiscalía indicó que horas antes del delito, los videos registraron a los dos sujetos cuando entraron al local de Paola, pero la víctima salió inmediatamente, lo que denota que el crimen iba a cometerse en ese lugar.
La pregunta que gira en torno a la investigación es cómo sabían los dos ejecutores que la pareja se dirigía al local de hamburguesas.
De acuerdo con versiones de familiares de la víctima, Cristian Diego N. G. aspiraba a ser policía, pues habría llegado hasta cuarto año, pero le dieron la baja porque se metió en una pelea que no le convenía.
El ahora procesado le habría tirado gas pimienta a una persona que era alérgica a eso. Le siguieron un juicio y le dieron la baja, aunque mantenía una buena relación con varios tenientes, subtenientes y capitanes.
El artículo 141 del Código Orgánico Integral Penal (COIP) sanciona el delito de femicidio con una pena privativa de libertad de 22 a 26 años.
Fuente: radiopichincha.com
