Una mujer de 77 años cumplió su sueño y se graduó, luego de vivir en condición de calle durante varios años. Vestida con su toga y portando un bastón que le ayuda a caminar, una mujer de 77 años logró su sueño de pequeña y graduó como barbera.
Esta es la historia de doña Rosa Hernández, una salvadoreña radicada en Costa Rica que vivió durante varios años en condición de calle y como vendedora ambulante. Según narró al medio local La Teja, durante muchos años vivió de aquà para allá vendiendo sus productos, pero hace un tiempo tuvo un accidente y comenzó a tener molestias en las rodillas, asà que echó raÃces en una zona céntrica de Costa Rica.
La mujer, de 77 años, pasó por momentos difÃciles, pero «afortunadamente nunca consumà sustancias ni pedà dinero para salir adelante», confesó. Su sueño era convertirse en estilista, asà que, a pesar de su condición de vida, comenzó a recibir clases como barbera en la Academia de Artes de Chepe Se Baña.
La mujer contó que desde niña le gustaba cortarle el pelo a todo el mundo, pero lo que más disfruta es la barberÃa, pues le «encanta» cortarle el cabello a los hombres y hacerles la barba, aunque también le gusta hacer uñas, peinados y alisar el cabello.
Llegó a la academia cuando ofrecÃa sus productos. Les contó que le gustarÃa aprender y le dieron la oportunidad. Fue asà como doña Rosa inició su sueño. Ahora también estudia belleza, inglés y computación.
«También logré derribar mitos, soy una persona grande y una vez me dijeron que para qué estudiaba, si ya me iba a morir y pese a mis problemas de salud y gracias a Di0s sigo aquÃ. Tal vez me cueste caminar, pero mi cerebro funciona y por eso quiero seguir aprendiendo», dijo.
Al tiempo que aseguró que cuando corta el cabello se siente liberada, aunque a veces tiene que decirle a sus clientes que le tengan paciencia debido a que debe tomar algunos descansos por el problema de sus rodillas.
«Yo le doy un mensaje a los jóvenes, para que aprovechen el tiempo. Que se levanten temprano, que no estén tanto tiempo con el celular. Yo me levanto a las dos de la mañana para vendarme las piernas y asà poder estar en pie. Hay jóvenes que no quieren luchar, lo quieren todo gratis y ojalá vean en mà un ejemplo», subrayó.
Fuente: SOY502