El último viernes de mayo cerró con un estremecedor hallazgo en el kilómetro 20 de la ruta al Atlántico. A un costado de la carretera, fueron localizados tres cuerpos dentro de costales en avanzado estado de descomposición. Bomberos Municipales Departamentales y Bomberos Voluntarios acudieron tras recibir la alerta y, con mucho esfuerzo, lograron extraer los cuerpos para entregarlos al Ministerio Público.
Tras varias horas de investigación, las autoridades lograron identificar a las víctimas. Se trata de Ángel Aarón Alvarado García, de 16 años, originario de la colonia La Fuente, zona 5 capitalina; Sergio Alejandro Samayoa Soyos, de 15 años, vecino de la colonia Arrivillaga, también en zona 5; y Kevin Alexander Toledo Chilel, de 18 años.
Tres jóvenes con la vida por delante, cuyas muertes han conmocionado a sus comunidades. Aún no se ha confirmado la causa exacta del fallecimiento, pero por las circunstancias del hallazgo, se presume que se trata de un crimen múltiple. Las autoridades continúan investigando el caso, mientras familiares claman por justicia. Este hecho ha encendido las alarmas sobre la violencia que continúa afectando a la juventud guatemalteca.